Equipo, ropa, comida, mochila y ganas de pasarlo bien; son todos los ingredientes de todo buen viaje de Ski. Aunque para eso no hace falta irse de erasmus, he de reconocer que estar aquí predispone a ver las cosas de otra manera, y a disfrutar un poco más de la vida. Que hay tiempo para todo (Aunque no lo parezca eso era para dar ánimos a la gente, no envidia :P).
Como siempre, viajamos con AK-Erasmus, que han demostrado una vez más que saben liarla bien. Fiesta en el bus, buen rollo y canciones
Tim Toupet - Ich bin ein Döner
Para los que se preguntan que estará diciendo este:
Ich hab ne Zwiebel auf'm Kopf, ich bin ein Döner, denn Döner macht schöner.Literalmente:
Ich hab ne Zwiebel auf'm Kopf, ich bin ein Döner.
Ich hab mich zum fressen gern.
Tengo una cebolla encima de la cabeza, soy un Döner, pues un Döner es bonito.Temazo, y sí, esto se escucha por ahí. Y da igual que hayas estado esquiando de 9 a 16 sin parar y comiendo en el telesilla, los alemanes (o austríacos que vienen siendo lo mismo) lo parten en los bares de Aprés-ski como si no hubiera un mañana.
Tengo una cebolla encima de la cabeza, soy un Döner.
Estoy muy rico.
En el bando académico hay novedades, si bien no de las buenas. El martes se suponía que empezabamos con los ensayos finales; madrugón y shuttle hasta Campus Nord, todo para que al llegar allí te digan que el responsable de la maquinita y demás sistemas está enfermo, y que él es el único que tiene las contraseñas. Para que luego digan de la eficiencia alemana.
Así que de momento mis planes están en el aire, pendientes de la pronta recuperación del susodicho. Futuros planes de viaje, y la esperanza de acabar en plazo el proyecto se ven amenazados... Desde aquí le mando mis ondas telepáticas famosas por su poder curativo, y si no le funcionan, que se tome un frenadol y se deje de chorradas.
PD: Si a estas alturas aún seguís por aquí ya os tienen que empezar a gustar las alemanadas, así que aquí va otra.
Planlos - Verdammt ich lieb Dich, original de Mattias Reim.